Embarazada en las semanas 6
Longitud: 0.4 cmPeso: 0.2 g
Desarrollo del bebé
El cerebro se ha empezado a desarrollar y el corazón, que no es mayor que una semilla de amapola, ya ha empezado a latir.
La cavidad abdominal, la cavidad torácica, la columna vertebral y el aparato digestivo han empezado a tomar forma al tiempo que me empiezan a salir unas piernas y brazos diminutos. Ya se me ven la mandíbula y los dientecitos. Hacia el final de la semana, la sangre de mis venas ya fluye a toda máquina y deberías ser capaz de distinguir mis ojos, nariz y boca (si pudieras verme, claro). El saco amniótico se está formando, pero todavía no contiene líquido amniótico. El cordón umbilical también está en las fases iniciales de su desarrollo, pero todavía es corto y necesita fortalecerse un poquito más para ser capaz de aguantar todos los estirones y golpes que daré más adelante durante el embarazo. Las primeras semanas están repletas de un montón de desarrollos rápidos, a pesar de que mucha de esa actividad pase desapercibida para mamá en esta etapa.
No es tan grave que a la mamá se le ocurra comer o beber algo que no está recomendado durante el embarazo: el bebé sigue recibiendo los nutrientes del saco vitelino hasta la semana 9 o 10 aproximadamente. Ahora, una vez que la madre se entera de que está embarazada es conveniente que tome nota de las recomendaciones sobre lo que debe comer y beber durante el embarazo.
Desarrollo de la madre
Es probable que ahora estés empezando a notar los síntomas del embarazo. Las náuseas y los vómitos son frecuentes y, normalmente, los más molestos.
Si vomitas mucho, igual estás preocupada por la falta de nutrientes para tu hijo/a nonato/a. No te preocupes. Vomitar no le hace daño a tu bebé. El alimento le llega de nutrientes ya digeridos, y así consigue todo lo que necesita. Los cambios en los niveles hormonales del cuerpo provocan náuseas. El estrés, el hambre y la fatiga agravan los síntomas, así que escucha a tu cuerpo, descansa y come poco y a menudo. Los alimentos fríos que no huelan demasiado pueden ayudarte a combatir las náuseas. Si te encuentras muy, muy mal, hay medicamentos con y sin receta que puedes comprar para hacer que mejore la situación. No obstante, asegúrate de hablar siempre con un/a doctor/a o matrona antes de tomarlos.
Otros síntomas frecuentes del embarazo incluyen pechos doloridos y sensibles, dolores de cabeza y cansancio. También puedes sentir entumecimiento en la parte baja del abdomen, un dolor que a veces se extiende hacia la región inguinal. Puede que sea a causa de que el útero se va expandiendo, lo que es bastante normal, pero un poco incómodo. Si te da la sensación de que necesitas hacer pis todo el rato, es por un aumento de GCH en la sangre. El útero en expansión unido a los riñones haciendo horas extras para expulsar residuos del cuerpo son algunas de las razones por las que necesitas aliviarte a menudo. No es peligroso y acaba desapareciendo más adelante durante el embarazo.
Co-padre
¿Tu pareja piensa que la comida que cocinas huele mal? o, peor aún, ¿que tú hueles mal?
Sabemos que decirte que eso es perfectamente normal no te va a traer mucho consuelo, pero… ¡es que eso es perfectamente normal! Una buena forma para sobrellevar esta situación es averiguar qué olores le molestan a tu pareja, así puedes escabullirte por la mañana y preparar un pequeño desayuno para sorprenderla en la cama. Durante las mañanas, las náuseas suelen estar en su peor momento, por lo que llevarle una bandeja con alguno de sus alimentos favoritos (¡que no le huela mal!) puede ser una buena ayuda para aliviar las náuseas. Lo más habitual es que tu pareja sienta estos síntomas hasta la semana 12 del embarazo; a partir de ese momento cambian y, quién sabe, ¡puede que de repente empieces a olerle bien otra vez!
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