Embarazada en las semanas 9
Longitud: 1.9 cmPeso: 2 g
Desarrollo del bebé
Mis ojos ya tienen párpados, las orejas están en su sitio y la naricita se ha hecho mucho más pronunciada.
Incluso los dedos me han crecido más y la membrana interdigital casi ha desaparecido por completo. En esta semana también se desarrollará un importante músculo: el diafragma, que, más adelante, me permitirá respirar con facilidad. También hacen su aparición el hígado, el bazo y la bilis, y mi corazón ya está completamente desarrollado. ¡Qué momento más interesante!
Internamente, mis genitales (esto es, mis ovarios o testículos) ya están formados, pero externamente tienen el mismo aspecto. Todavía recibo algunos nutrientes del llamado «saco vitelino», pero la placenta va tomando lentamente el relevo. Cuando ya no tenga nada que hacer, el saco vitelino se irá debilitando lentamente hasta desaparecer.
La placenta actuará como un órgano externo, dado que mis pulmones, intestinos, hígado y riñones todavía no se han terminado de desarrollar.
Desarrollo de la madre
Con un útero que ahora es el doble de grande de lo normal, es posible que los pantalones te empiecen a apretar un poco alrededor de la cintura...
Igual notas que te salen unos bultitos diminutos alrededor de los pezones. Son lo que se denomina «glándulas de Montgomery» o «glándulas areolares». Dichas glándulas producen una secreción oleosa que lubricará el pezón y la areola en el momento de la lactancia. La secreción también contiene agentes antibacterianos que inhiben el crecimiento bacteriano. Una señal evidente y no poco frecuente es que la salud de tu piel empeore y te salga acné. También te pueden sangrar un poco las encías, ya que se vuelven más blandas. Las mucosas también se ven afectadas por el embarazo. La congestión y el sangrado nasal son frecuentes. Pero no te preocupes. Esos síntomas no son peligrosos.
Co-padre
¿Te sientes un poco excluido? ¿Te parece que todo gira en torno a tu pareja embarazada y al bebé que va a nacer?
Así son las cosas, y el hecho de que el estado de ánimo de tu pareja esté cambiando constantemente (debido a las hormonas) también te puede resultar duro. Pero no te desanimes, aunque sientas que no se te aprecie mucho, ahora mismo eres más valioso de lo que crees. Continúa, mantén la cabeza en alto y piensa que pronto acabarán las semanas difíciles. Se acerca la luz al final del túnel.
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